Hoy me ha picado la curiosidad y he navegado
extensamente por Internet intentando poner cifras a esos grandes animales africanos.
Calcular el número de hipopótamos o de bonobos no es precisamente un ejercicio
tan preciso como hacer un censo de población de humanos. No obstante, en los últimos
años los biólogos han hecho un esfuerzo serio para calcular a grandes rasgos
cuantos ejemplares quedan de muchos de los mamíferos africanos más populares. No
obstante, contar grandes ‘bichos’ no es, ni mucho menos, una ciencia exacta. He
tenido que consultar más de una treintena de páginas Web para obtener
resultados convincentes, y de algunas especies que también me interesaban, como
las gacelas, las hienas, no he encontrado ni la minina referencia poblacional.
A pesar de todo me doy por satisfecho con
los datos que he logrado reunir. Son verdaderamente sorprendentes…y tristes. En
África viven 1,100 millones de personas, pero solo 30,000 leones. Las cebras,
que tan numerosísimas nos parecen cuando las vemos en grandes manadas en los
reportajes de la tele, son en realidad tan solo unas 660,000 en todo el continente;
ósea, hay una proporción de una cebra por cada 2,000 africanos, más o menos.
Las cifras también nos permiten sopesar
la importancia de unos animales respecto de otros, y los resultados son a veces
sorprendentes. Por ejemplo, tienes 20 veces más posibilidades de avistar en África
un leopardo que un guepardo, y también es inmensamente más probable toparse con
un elefante en lugar de con un rinoceronte. Yo nunca hubiera dicho que de hecho
hay casi el doble de elefantes que, de chimpancés, o que hay muchísimos más hipopótamos
que jirafas.
En el fondo, tiene sentido que nuestra imaginación
nos engañe y nos haga pensar que en realidad son muchos más los animales que
pueblan África, ya que hubo un tiempo en que las cosas, en verdad, eran bien
diferentes. Es estima que hace un siglo vivían en África 4 millones de
elefantes; hoy se calcula que su población se ha reducido a algo más de una décima
parte de esa cifra. Los leones, por su parte, pasaron en el mismo periodo de
200,000 a 30,000, en tanto que, en el caso de los rinocerontes, la caída ha
sido en estos algo más de 100 años, todavía más brutal: de 400,000 a 26,000.
La estimación más antigua del número de gorilas
en África data de los años 60. En aquella época se consideraba que casi un millón
de estos grandes simios poblaban el trópico africano. Los censos actuales han
reducido ese número a apenas 160,000. El caso de las jirafas es particularmente
llamativo: En los últimos 15 años han caído a la mitad.
El primer paso afrontar un problema es conocer su dimensión real. África está viviendo una extinción masiva de especies. Por mucho que las fotos del National Geographic aún nos muestren un idílico paraíso superpoblado de maravillosos animales, la verdad es que, fuera de contados parques naturales, África es ya un yermo de la gran fauna.
El primer paso afrontar un problema es conocer su dimensión real. África está viviendo una extinción masiva de especies. Por mucho que las fotos del National Geographic aún nos muestren un idílico paraíso superpoblado de maravillosos animales, la verdad es que, fuera de contados parques naturales, África es ya un yermo de la gran fauna.
No hay comentarios:
Publicar un comentario