NOTA DE PRENSA DEL LANZAMIENTO DE PERRO BERDE
Nace una nueva publicación filipina en español
La revista cultural Perro Berde, la única publicación cultural filipina en español, lanzará su primer número el próximo 26 de junio en el Instituto Cervantes de Manila.La revista, iniciativa de un grupo de escritores filipinos y españoles residentes en Manila, se postula, en palabras de Juan Echanove, miembro del consejo de redacción, “como un espacio de encuentro entre creadores de Filipinas y del mundo hispánico, una oportunidad para un diálogo cultural que, a pesar de la historia en común, en las últimas décadas no ha sido muy abundante”.
Patrocinada mayoritariamente por la Embajada de España en Filipinas y la AECID, Perro Berde es la última heredera de una larga tradición de publicaciones filipinas en español, idioma en el que apareció el primer periódico filipino, Aviso de noticias, en 1806. A lo largo de esos dos siglos, centenares de cabeceras de publicaciones periódicas han informado a los filipinos en la lengua española. Tras 1898, la prensa en español experimentó un gran impulso, pues en torno a un número de periódicos, y utilizando la lengua como seña de identidad independentista, se articuló la resistencia a la conquista norteamericana por parte de los más importantes intelectuales filipinos del momento.
Pero si todavía en las dos primeras décadas del siglo XX se publicaban 27 diarios en español y en 1940 la Oficina de Publicaciones contabilizaba 40 publicaciones en castellano, la eliminación del español en la educación y las consecuencias de la guerra mostrarán un paisaje muy distinto tras la II Guerra Mundial, cuando, diezmada la última generación hispanohablante, tan sólo reanudan su publicación algún diario y escasas revistas de corta vida o alcance regional. Todavía en la década de 1980 se podía encontrar en los quioscos El Debate, último diario sobreviviente.
En la última década, la situación para las publicaciones en español es aún más precaria: Ateneo University dejó de publicar su revista Azúcar en 2000, y Nueva Era, una nostálgica gaceta quincenal que ha sobrevivido con gran mérito durante décadas, cerró a mediados de 2008.
Perro Berde es la más reciente apuesta por revivir esa tradición. El nombre de la revista es un compuesto de una palabra española y otra vernácula presente en varios idiomas de las Islas (berde, con la ortografía tagala, que no tiene la letra v). Con ese título, además de aludir a la rareza de la escritura filipina en español, la publicación busca, en palabras de su editor en español Juanjo Sanz del Álamo, “transmitir desde su cabecera el espíritu de mestizaje y diálogo cultural que vertebra el proyecto.”
Por ello
, la revista está redactada además de en castellano, en filipino y algunos otros de los 16 idiomas hablados en las Filipinas, un país compuesto por más de 7.000 islas y que ha generado una gran diversidad lingüística. “Precisamente, por respeto a esa enorme riqueza lingüística, hemos querido mostrar composiciones en varias lenguas del país, además del filipino: cebuano, karay-a, chabacano…”, afirma Shirley Lua, editora filipina del proyecto y escritora en inglés, chino y filipino. Entre los idiomas de la revista se encuentra el chabacano, una lengua criolla fruto del contacto entre el castellano y los idiomas locales.
El número inicial de Perro Berde, que acoge ilustraciones del pintor César Caballero, cuenta entre sus colaboradores con algunos de los principales escritores filipinos actuales, como Bienvenido Lumbera, Marjorie Evasco, Marra Lanot, Joi Barrios, Roland Tolentino, Francis Macansantos y Sid Hildawa. A este último, poeta fallecido en 2008, se le homenajea con un suplemento especial en el que por primera vez se traducen varios de sus poemas al español. Abre las páginas de la revista otro homenaje, éste al poeta argentino Juan Gelman, de quien se ofrece una entrevista y una selección de su poesía en versión bilingüe (español y filipino). Entre las firmas en español se encuentran las de Juan Echanove, Jaroslav Ludva, Gabriel Munuera, Eva Pastrana y Juanjo Sanz del Álamo.
La revista ofrece además una sección académica, dedicada en esta entrega inicial a la literatura clásica filhispana y su encaje en el canon literario filipino, con artículos de Pedro Aullón de Haro, David Hernández de la Fuente y Wystan de la Peña.
El lanzamiento de Perro Berde se produce en un contexto de un cambio positivo hacia el español por parte de la Administración filipina, tras décadas de prohibición y abandono, que lo llevó a su desaparición de la vida pública y cultural del país. Ahora, tras un decreto presidencial de diciembre de 2007 que persigue reintroducir el castellano en la enseñanza pública, se abre un prometedor periodo para la difusión del español. “Lo más importante de este cambio de orientación es que, más allá de nostalgias históricas, tiene un claro motivo económico”, asegura Luis Arias, embajador de España en Manila, “pues es la propia Administración filipina la que reconoce el valor del español como segunda lengua internacional, como fuente de posibilidades laborales en una economía globalizada. Esto es de tremenda importancia en un país que exporta más de ocho millones de trabajadores.
(Foto: obra de Cesar Caballero)